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Deseo sexual en la tercera edad

A los 60 años comienza la mejor etapa de la vida para disfrutar el sexo

Aunque algunos creen que después de los sesenta se produce una inhibición del

 deseo sexual,

  otros afirman que el hombre necesariamente va a sufrir de

 impotencia (disfunción eréctil)

  la experiencia de muchos que han sobrepasado este límite de edad, indica que por el contrario, puede ser la mejor etapa de la vida para disfrutar el sexo. Los adelantos de la medicina, tales como las

 hormonas bioidénticas

  que te devuelven a los treinta años, las Células madre, las famosas pastillitas, la buena alimentación y el ejercicio físico frecuente son factores que influyen en que las personas vivan más tiempo manteniendo una buena condición general de salud.

 

El paso de los años no borra los sentimientos ni las necesidades de tipo afectiva que tienen esas personas. Puede haber condiciones especiales de salud que dificulten o aún imposibiliten la actividad sexual con penetración en esta etapa, y no por ello se elimina el interés de compartir con su pareja. Las personas deben aprender de una vez por todas que el sexo es mucho más que penetración, sexo oral, estimulación mutua de los genitales, besos, caricias y un gran ETC son parte importante y placentera de la sexualidad. Por lo general somos muy genitales.

Es conveniente destacar que es posible que se hagan notar importantes cambios físicos, como el volumen del cuerpo, el color del cabello, la posición del cuerpo al caminar y otros. Sin embargo, es interesante pensar que esa es la misma persona con la que usted se casó. A pesar de los cambios externos, hay en el interior de esa persona algo admirable que son esos valores y cualidades que sobresalen más allá de la belleza física.

Esposos que han cultivado una buena comunicación durante los primeros años de su matrimonio y tienen una salud estable, encontrarán todavía más motivos para una buena relación íntima. Si cuando eran jóvenes como matrimonio tenían relaciones sexuales de calidad, es muy probable que en la adultez, cuando tal vez el nido ya esté vacío, las relaciones continúen con notable chispa.

Una de las ventajas de la sexualidad geriátrica es que la mujer no tiene por qué temer a quedar embarazada, lo que puede aumentar su relajación. Con todo, aunque la mujer ya no tenga la capacidad reproductora, en ningún modo ha perdido su excelente capacidad de amar ni su sexualidad no genital, ojo con esto.