En la hermosa isla de Puerto Rico me levanto temprano para ensayar mi espectáculo TODO SOBRE EL AMOR, y como siempre pongo DESPIERTA AMERICA, mientras me cambio. Vaya sorpresa que me lleve. Estaban hablando sobre una canción que había sacado alguien en California (no pude saber más, ya que el segmento había empezado) en la que una esposa le pedía a su marido que le diera SOLO UNA NOCHE con otro hombre, que al igual que le decía el a ella, no sería nada importante, ni siquiera le gustaba… Lo que me preocupo no fue eso, sino la reacción de muchas mujeres a las que se les pregunto que opinaban sobre esa canción. Todas dijeron que si, que ya era hora de que ellas pudieran disfrutar, como los hombres, de solo una noche con otro, total ellos lo habían sido infieles varias veces. Sencillamente, no estoy de acuerdo. ¿Qué logramos las mujeres haciendo los mismos disparates que los hombres? ¿Se obtiene algo cuando devolvemos engaño con engaño y traición con traición? ¿Debemos pagar la deslealtad con deslealtad?
Bajo ningún concepto aplaudo la conducta masculina de infidelidades y abusos, pero también bajo ningún concepto puedo aplaudir esta conducta que cada día se extiende más, las mujeres queremos pasar factura a los hombres por algo que le permitimos y de lo cual hemos sido responsables en gran parte. Nuestro miedo a enfrentar la vida solas, el no habernos preparado profesionalmente, nos convierte en esclavas de esta situación…en la cual tenemos nuestra cuota de responsabilidad. LA DEPENDENCIA FOMENTA EL ABUSO. Hay que tomar las riendas de nuestra vida, para poder tener una relación de iguales con los hombres.
Este tipo de reacción no es digno de adultos que tiene hijos a los que le sirven de ejemplo, al menos que quieran perpetuar el fracaso en las parejas. Es de personas brillantes, aprender de los errores de los demás para no cometerlos. Nuestros hijos tendrán una relación de pareja estable, solo si nosotros logramos tener una
relación de pareja
funcional. Esa es una responsabilidad muy grande, con la que no se debe jugar…ese juego nos pasa factura en la vida, cuando más necesitamos compañía y afecto: en la vejez.
Hoy me entere de la muerte de un amigo, solo en su casa, lo vinieron a descubrir varios días después. A pesar de haberse casado y tenido hijos, murió solo. Nunca pudo lograr una relación aceptable con sus hijos ni su esposa. Mi consulta me confirma cada día más que este tipo de comportamiento solo lleva a un lugar al cual todos tememos y todos conocemos, LA SOLEDAD.
La mujer moderna no debe permitir este tipo de engaños y deslealtades a sus esposos, si no puede sola, entonces debe buscar ayuda profesional para superarse y resolver los temas no resueltos de su niñez que la llevan a ese callejón sin salida. Aplicar la ley del ojo por ojo y diente por diente, es solo hacerse daño y dañar a los que ella más ama: sus hijos.
El
matrimonio
es algo SOLO PARA ADULTOS, tristemente muchos hombres nunca llegan a ser adultos, no nos pongamos nosotras en ese lugar. Si un hombre le es infiel, exíjale buscar ayuda profesional para parar este fenómeno, admita su parte de responsabilidad, ya que cuando dos están bien, cabe un tercero. Si no acepta buscar ayuda, si sigue en ese comportamiento, déjelo…sino puede sola vaya a
terapia,
SE PUEDE!