fbpx

La Violencia, Orientacion e Identidad Sexual

La gente tiende a confundir la orientación sexual con la identidad de género y la identidad sexual. Esto tiene tremendas repercusiones en la violencia y las relaciones hombre-mujer. Sería bueno tener claro que sexo es algo físico que nos diferencia a las mujeres de los hombres. Si usted tiene vulva,  es una mujer. Si usted tiene pene es un hombre. En fin, sexo es una diferencia biológica que distingue el macho de la hembra. Es algo natural, con lo que nacemos y casi nunca se modifica. Hoy un transgénero o transexual, como se llamaba antes, puede nacer con pene y operarse para convertirse en mujer. Realmente era una mujer presa en el cuerpo de un hombre. Pero por lo general nacemos y morimos con un sexo físico: vulva o pene.

Cuando hablamos de género entra en juego lo social, lo cultural, lo psicológico. Son los rasgos psicológicos que se le atribuyen a uno de los sexos, por ejemplo, ser mujer implica ser tierna, cuidar, dar. Es también lo que la cultura y la sociedad define como adecuado a ese sexo. Lo que la cultura y la sociedad esperan de ese sexo, ser hombre implica ser fuerte, exitoso, analfabeto emocional y un gran etc. Gracias a Dios, esto es modificable. Es la cosmovisión que se tenga de la feminidad y la masculinidad.

La identidad sexual es sentirse hombre o mujer, de acuerdo a su sexo físico. Si usted es hombre y tiene un pene, ama su pene, le gusta ser hombre, tiene su identidad sexual OK. Nunca olvidare a un paciente transgénero, cuando me contaba como odiaba su pene, le repugnaba verse lleno de vellos, músculos y sobretodo tener un pene. Se sentía ser mujer y le molestaban por tanto, esas características masculinas.

La identidad de género se refiere a sentirse a gusto, identificarse, con lo que implica la feminidad o la masculinidad en una cultura, época histórica y geográfica, determinada. Así cuando una niña empieza a pintarse y ponerse los tacos de mama, sabemos que esta identificándose con su género.

Orientación sexual, es diferente a los otros dos conceptos. La orientación sexual tiene que ver con el deseo, a quien deseamos, con quien anhelamos hacer el amor, de quien nos enamoramos. Esta se ha dividido en tres categorías: homosexualidad, bisexualidad y heterosexualidad.

¿Por qué aclaro esto? Gracias a la confusión entre orientación sexual e identidad sexual, tenemos tanto machismo y todo el dolor y la disfunción que ello implica. Los padres en su afán de “prevenir” que su hijo sea homosexual o bisexual, por la gran homofobia que caracteriza esta sociedad, aunque la disfracen de leyes anti-discrimen, educan a sus hijos varones con distancia emocional, fríos, insensibles, duros…los hombres no lloran. Así ser hombre es NO PARECERSE EN NADA a ser mujer. El hombre debe romper el vinculo que tuvo con su madre, algunos lo hacen de forma brusca y determinante, logran diferenciarse odiando y rechazando todo lo femenino, así de niño dependiente de mama pasa a ser el macho que domina y maltrata a la mujer. Otra forma fallida de diferenciarse de lo femenino, para poder tener una “identidad masculina” es renunciar a romper el vínculo con su madre. Son los seductores, los que saltan de una relación a otra, estos hombres les cuesta sostener una relación estable y duradera, no saben asumir compromisos.

Jorge Corsi, en su libro “Violencia masculina en la pareja” nos habla del hombre “duro” y el hombre “inmaduro”. Saunders (1992) habla del hombre dominante y el dependiente. Ambos se corresponden con los que ejercen violencia. El duro o dominante tiende a ser violento tanto en el ambiente externo como en el familiar, ejerce su poder “desde arriba”. Elige mujeres sumisas y tradicionales, mujeres que a su vez buscan ser protegidas, ya que no son seguras, tratan de que ellos le den la supuesta “seguridad” que ellas no tienen. El inmaduro o dependiente, tiende a conquistar, no puede establecer verdaderos vínculos emocionales, realmente no ha roto su vinculo con mama, por lo que busca mujeres maternales. Ejercen su poder “desde abajo” son niños caprichosos, esperan que la mujer se ponga a su servicio. Estos son violentos en el ámbito domestico.

En resumen:

  • La gente tiende a confundir identidad de género, sexual y orientación sexual.
  • Esta confusión tiene consecuencias terribles para las relaciones de pareja y la violencia domestica.
  • La homofobia nos lleva a convertir al hombre en todo lo contrario de lo femenino.
  • Así el hombre se ve obligado a romper el lazo de afecto que tenia con mama, muchos  lo hacen bruscamente,  rechazando lo femenino y es el llamado hombre duro o dominante. Ejerce el poder “desde arriba”.
  • Otros no rompen nunca el vinculo, se vuelven seductores, incapaces de tener relaciones estables, Incapaces de comprometerse. El dependiente o inmaduro. Ejerce el poder “desde abajo”.
  • Ambos hombres son violentos, el duro lo será en la sociedad y en la familia, el dependiente lo será en el ambiente domestico.