La Navidad es una época que puede ser muy divertida pero también llena de ansiedad por los que no están con nosotros para compartir. Usted puede ayudar a disipar la parte negativa de la Navidad centrándose en lo que tiene y no en lo que no tiene.
Mantra de Intención
A veces es difícil dejar de pensar en alguien que murió, en un ser querido que vive en otro país o incluso en un ex esposo/a o novio/a. Repite el siguiente mantra en silencio y acompáñalo con respiración rítmica para purificar las energías de pena por no estar con esos seres queridos:
Por favor Dios, ayúdame con mi intención de sanar mi tristeza por no estar con ellos.
No tienes que especificar quiénes son “ellos”. Aunque tú no estés consciente, Dios va a saber que extrañas a tu abuela cada Navidad ¡a pesar de que murió hace 20 años!
Mantra de Purificación
Ahora vamos a centrarnos en lo que es bueno durante la Navidad. Haz una lista de lo que realmente te hace feliz durante estas fiestas. Mira la lista y cuando respires, imagina que estás ingiriendo esas palabras en tu mente.
Cada vez que te estés preparando para hacer algo de esa lista, como una fiesta de Navidad o la de Año Nuevo, repite este mantra mientras te preparas y te vistes para salir de la casa. Repite en silencio y con respiración rítmica:
Aunque temo que no voy a disfrutar,
Me amo y me acepto.
¡Aumenta el júbilo de Navidades con una visualización que sana!
La Navidad celebra la entrada en el planeta de una gran cantidad de luz durante los días más oscuros del año, el invierno. A pesar de que Cristo murió hace 2.000 años, podemos ayudar aumentando esa luz en nosotros mismos para luego compartirla con otras personas.
Prueba esta sencilla visualización:
Cuando veas la luz del sol, respira esa luz para que literalmente entre en tus ojos. Al instante tendrás más luz de la que tenías antes de respirar. Es posible que observes que respiras más profundo o más fácilmente.
Cuando veas a alguien durante las fiestas que está emocionalmente mal, no importa cuál sea el problema, visualiza que le estás enviando luz directamente de sus ojos a cualquier parte de su cuerpo. Si para ti es fácil sentir energías, observarás que la persona se relaja. Y no tengas miedo si alguien se echa a llorar porque eso significa que ayudaste a desencadenar una purificación a través de esas lágrimas. La Navidad es un tiempo muy espiritual pero de mucho trauma también. Usa los dones espirituales que Dios te dio para disfrutar la llegada de más luz para todos.